Por Antonio Rossi
Al cabo del primer año bajo la administración macrista, los trenes estatales de cargas --que están en la órbita del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich-- mostraron una magra perfomance que dejó en offside las promesas oficiales de recuperación ferroviaria y de reducción del costo de los fletes para las producciones regionales.
Los ferrocarriles Belgrano, San Martín y Urquiza –operados por la compañía estatal BCYL (Belgrano Cargas y Logística) que maneja el ex gerente de Mercedes Benz, Ezequiel Lemos—transportaron en 2016 un total de 2.497.876 toneladas, un 1,7% menos que en 2015, el último año de la gestión kirchnerista.
Comparado con la marca de algo más de 3,1 millones de toneladas que habían logrado transportar en 2014, el descenso que registraron los trenes estatales en 2016 llega al 26%, según los datos oficiales relevados por la Ferrocámara y la CNRT (Comisión Nacional Reguladora del Transporte).
La declinación de los trenes de cargas administrados por el Estado también se observa en el nivel de participación que tienen en la torta de las cargas transportadas. Tras haber alcanzado en 2014 el 16,3% del total de las toneladas movilizadas por ferrocarril bajaron al 13,7% en 2015 y al 13,2% de participación en 2016.
Desglosado por línea, el resultado operativo del año pasado dejó una buena y dos malas notas. En el caso del Belgrano Cargas, hubo un ascenso en las cargas movilizadas del 14%. En cambio, en el ferrocarril Urquiza sobresalió una caída interanual del 19%, mientras que en la red del San Martín la baja en el total transportado fue del 9%.
La planilla del Belgrano Cargas—el ferrocarril de trocha angosta que enlaza trece provincias y comunica con Bolivia y Chile—muestra que, si bien en 2016 logró elevar un 14% las cargas con un total de 965.471 toneladas, aún está por debajo de las 985.804 toneladas transportadas en 2014. Medida en toneladas-kilómetros, las cargas captadas en el último año exhibieron una mejora del 6%.
Por su parte, la línea Urquiza –que une Buenos Aires con las provincias mesopotámicas con conexiones a Uruguay y Paraguay— tuvo la caída más pronunciada del sector. Con apenas 109.305 toneladas, cerró 2016 con un descenso del 19% en las cargas transportadas. El deterioro de este ferrocarril se hace más notorio si se tiene en cuenta que lo transportado el año pasado es menos de la mitad de las 259.154 toneladas que había movilizado en 2014. En lo que respecta a la cantidad de toneladas por los kilómetros recorridos, la caída interanual 2016-2015 llegó al 21%.
En tanto, en la red del ferrocarril San Martín—que conecta la región de Cuyo y el sur de Córdoba con los puertos de Buenos Aires y del litoral santafesino—también se verificó en 2016 una caída interanual en las cargas transportadas del 9% (1.423.100 toneladas versus 1.556.709). En 2014, los trenes de esta línea habían superado la marca de 1,9 millones de toneladas anuales. En las toneladas-kilómetros, la declinación operativa entre 2016 y 2015 alcanzó al 13%.
Por el lado de los trenes de cargas que están en manos de las tres operadoras privadas del sector, los números del año pasado arrojaron un escenario claroscuro.
Si bien en total las cargas transportadas experimentaron un alza del 3,6%, los resultados individuales por empresa fueron dispares.
Ferroexpreso Pampeano—la operadora del corredor Rosario Bahía Blanca controlada por el grupo Techint—se vio beneficiada por la mayor producción agrícola y registró un incremento del 21% en las cargas transportadas. Pasó de 3.512.000 toneladas en 2015 a 4.234.000 tn. en el último año. En toneladas-kilómetros, su mejora operativa fue del 14%.
En el caso de Nuevo Central Argentino (NCA) –la concesionaria del ex ferrocarril Mitre que pilotea Aceitera General Deheza del grupo cordobés Urquía--, el aumento interanual en las toneladas transportadas fue del 4%, al pasar de 7.380.857 a 7.670.100. En la medición de las toneladas-kilómetros, la suba interanual también se ubicó en el 4%.
En cambio, Ferrosur –la operadora de la ex línea Roca manejada por la empresa brasileña Camargo Correa que está involucrada en la megacausa de corrupción del “Lava Jato”—tuvo una marca dispar. Si bien en las toneladas-kilómetros se mantuvo sin cambios, en lo que respecta al total transportado acumuló una baja interanual del 8%, al pasar de 5.073.131 toneladas en 2015 a 4.644.468 tn. en 2016.
Fuente: Publicado en lapoliticaonline.com