Por Antonio Rossi
En medio de la entrada en vigencia de la segunda tanda de aumentos de la segmentación tarifaria para los usuarios del servicio eléctrico que el Gobierno viene aplicando desde octubre, dos informes de consultores especializados pusieron sobre el tablero la carga y la incidencia fiscal que han tenido y siguen teniendo los subsidios estatales destinados al sector energético.
Un trabajo del economista e integrante Instituto Argentino de la Energía "General Mosconi", Alejandro Einstoss precisó que, entre 2008 y 2022, los gobiernos de Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Alberto Fernández transfirieron en concepto de subsidios al sector energético un total deu$s139.584 millones, un gasto equivalente a algo más del triple del monto del último préstamo acordado con el FMI.
Según el análisis de Einstoss, en los ocho años que duraron los dos mandatos de Cristina Kirchner entre 2008 y 2015, los subsidios para no aumentar las tarifas de luz y gas, cubrir el déficit de la Cammesa y atender los pagos de compensaciones a los productores gasíferos alcanzaron un total de US$ 75.547 millones.
El detalle de los desembolsos año por año muestra la siguiente secuencia: u$s 3.757 millones en 2008; u$s 3.386 millones en 2009; u$s 5.298 millones en 2010 y u$s 8.826 millones en 2011. Para el segundo período de CFK, los subsidios mostraron la siguiente evolución: u$s 9.748 millones en 2012; u$s 13.899 millones en 2013; u$s 15.800 millones en 2014 y u$s 14.833 millones en 2015.
Subsidios: qué sucedió durante los gobiernos de Macri y Alberto Fernández
El análisis de Einstoss -presentado en el último seminario anual del IAF- destacó que durante la gestión de Mauricio Macri los subsidios energéticos llegaron a un total de US$ 35.292 millones con el siguiente derrotero: u$s 14.273 millones en 2016; u$s 7.630 millones en 2017; u$s 8.630 millones en 2018 y u$s 4.759 millones en 2019.
En tanto, desde la asunción de Alberto Fernández hasta ahora, los subsidios volcados al área energética acumulan un total de u$s 28.745 millones. En el primer año del actual gobierno del Frente de Todos, los subsidios alcanzaron la línea de u$s 6.232 millones; saltaron en 2021 a u$s 10.893 millones y apuntan a cerrar este año en torno de los u$s 11.620 millones.
De esta manera, los subsidios energéticos en los últimos 15 años implicaron para el Estado y las cuentas fiscales un desembolso anual promedio de u$s 9.300 millones, prácticamente el doble de las reservas disponibles que tiene actualmente el Banco Central para atender el pago de importaciones.
El especialista del Instituto Mosconi consideró que "ahora el Gobierno con la segmentación tarifaria intentará reducir la cuenta de subsidios de 2023 en aproximadamente US$ 5.000 millones, quitando beneficios en forma gradual al 30% de los usuarios residenciales y al 100% de los comercios y pymes abastecidas por las distribuidoras".
Qué pasa con el RASE
Con respecto a RASE (Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía), Einstoss advirtió que podrían plantearse numerosos errores de exclusión.
Explicó que "el Gobierno considera que 30% de la población que no se inscribió en el registro puede pagar el costo energético pleno, pera esa interpretación podría ser un error porque en provincias como Córdoba y Santa Fe más del 45% de los usuarios residenciales quedaron en condiciones de perder la totalidad de los subsidios y enfrentarán aumentos superiores al 200% en sus facturas eléctricas".
El mayor impacto para los bolsillos de los hogares que queden sin subsidios se dará en el primer bimestre de 2023, cuando el último escalón de aumento entre en vigencia y se suman los consumos eléctricos del verano.
Subsidios energético, temporada 2022
Por su parte, otro informe de la consultora Economía y Energía (E&E) -que dirige Nicolás Arceo- destacó que, entre enero y octubre de este año, la Nación lleva acumulada una remisión de subsidios al sector energético de u$s 10.710 millones.
El 70% de ese total (u$s 7.535 millones) fueron a reforzar la caja de la Cammesa para cubrir parte de los costos de la tarifa de luz correspondientes a la generación eléctrica.
El año pasado, el Gobierno había destinado un total de u$s 11.003 millones para compensar los desequilibrios económicos del sector energético que por decisión política no fueron trasladados a las tarifas finales de los consumidores.
En lo que va de 2022, el promedio mensual de los subsidios energéticos llega a u$s 1.071 millones y de mantenerse esa tendencia se llegará a fin de año con un desembolso acumulado que estará algo más de un 10% por encima del registro de 2021.
Cuántos dólares se transfirieron en octubre por la quita parcial de subsidios
Por el impacto inicial de la quita parcial de subsidios derivada de la segmentación tarifaria, en octubre se transfirieron u$s 685 millones para atender la cuenta de los subsidios energéticos. Fue el monto mensual más bajo registrado desde enero pasado, cuando la partida de subsidios había sido de sólo u$s 442 millones.
Durante varios meses, el monto mensual de subsidios se vio disparado por encima del promedio debido a las millonarias asistencias que debieron girarse a la Cammesa y la empresa estatal Enarsa para cubrir las importaciones de combustibles líquidos y gas por barco para las centrales de generación térmica.
El salto más significativo se dio en el mes de junio cuando los auxilios económicos para la Cammesa y Enarsa treparon a un total de u$s 845 millones mensuales. En tanto, en marzo y julio, los subsidios demandaron un monto mensual de u$s 1.300 millones.
Basado en los datos oficiales recopilados de ASAP (Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública) y del portal Presupuesto Abierto, el informe de la consultora E&E destacó que fondos enviados durante este año a la Cammesa (u$s 7.535 millones) superan en un 32% las remesas que había recibido en el mismo período enero-octubre del año pasado (US$ 5.729 millones).
En tanto, por el lado de Enarsa, las planillas exhiben que la asistencia económica de US$ 2.513 millones que lleva ingresada en lo que va de 2022 está un 20% por encima de la suma que le habían girado en los primeros 10 meses del año pasado (US$ 2.084 millones).
El único ítem que no creció fue el referido a las compensaciones económicas a las productoras adheridas al plan Gas. Registró una caída del 67%, al pasar de u$s 518 millones pagados por esa vía entre enero y octubre de 2021 a los u$s 251 millones que se liquidaron en el mismo período de este año.
La reducción de este subsidio específico se explica por la finalización del régimen de estímulos económicos para ampliar la producción de gas de Vaca Muerta que había implementado en 2017 el ex ministro de Energía de la gestión macrista, Juan José Aranguren.
Fuente: iProfesional
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