Por Antonio Rossi
Pese a que tiene el camino despejado para volver a privatizarlos en cualquier momento; el Gobierno de Javier Milei resolvió dejar los trenes de cargas concesionados durante el menemismo en manos de las actuales operadoras privadas y posponer hasta mediados del próximo año un reordenamiento definitivo del sector.
La decisión oficial --que estira los plazos de la reprivatización de los servicios de cargas que había sido anunciada por Milei en la campaña electoral-- favorece a Ferroexpreso Pampeano (la concesionaria del corredor cerealero Rosario-Bahía Blanca que controla el grupo Techint); Nuevo Central Argentino (la operadora de la línea Mitre manejada por el grupo Urquía por medio de Aceitera General Deheza) y Ferrosur (la empresa que opera los trenes de la línea Roca bajo el mando del grupo brasileño Camargo Correa).
Tal como había hecho la anterior gestión de Alberto Fernández; el ministro de Economía, Luis Caputo decidió seguir postergando la finalización de los contratos de los tres ferrocarriles cargueros que establecen las normas vigentes y mantener en pie a los actuales concesionarios privados.
A principios de mayo -por medio de la resolución la resolución 269/2--, el titular del Palacio de Hacienda había prorrogado hasta fines de abril de 2025 la concesión de los trenes de cargas de Ferroexpreso Pampeano, empresa que tiene su contrato originario vencido desde 2021 y aún sigue funcionando con permisos provisorios.
Al igual que las dos prórrogas que habían concedido los funcionarios del gobierno anterior, Caputo justificó la continuidad de Ferroexpreso Pampeano con el argumento de que "resulta razonable para poder evaluar y ponderar la viabilidad económica, el estado de la infraestructura y el plexo normativo vigente para la concreción de un futuro proceso de contratación adecuado y eficiente que garantice la continuidad y regularidad del servicio ferroviario de cargas".
A esa medida, le siguió esta semana otra de igual tenor por la cual la administración libertaria procedió a ampliar hasta fines de junio de 2025 la concesión de los servicios ferroviarios de cargas que opera Nuevo Central Argentino (NCA).
La decisión de Caputo sobre el sistema ferroviario
A través de la resolución 497/24, Caputo destacó "resulta necesario extender el plazo de continuidad del contrato de concesión de NCA a los fines de garantizar la operación de los servicios, la cual se efectuará con carácter precario y podrá ser revocada, en cualquier momento sin que se genere derecho subjetivo, derecho en expectativa o precedente invocable alguno a favor del operador, ni reconocimiento de suma alguna por la eventual revocación anticipada al plazo previsto".
En el caso de Ferrosur, las autoridades de Economía ya tienen en carpeta una resolución similar que quedará oficializada en los primeros días de julio para prorrogar esa concesión hasta mediados del próximo año.
De acuerdo con lo previsto en ley de reordenamiento ferroviario 27.132-- que fue aprobada a principios de 2015-- y la resolución 211/2021 del ex ministerio de Transporte; los trenes de cargas privados ya tendrían que haber vuelto a la órbita estatal hace más de tres años cuando expiraron los plazos de las concesiones menemistas.
Según las reglas de juego vigentes, la "reconfiguración" del negocio de las cargas ferroviarias que debería llevar adelante el Gobierno Nacional implica la concreción de dos cambios relevantes: la salida de los actuales concesionarios privados y la implementación de un modelo operativo de libre acceso (Open Access) a todas las redes ferroviarias con pago de peajes para que los nuevos operadores habilitados por la CNRT puedan armar sus trenes a medida con locomotoras y vagones alquilados al Estado.
Ese nuevo esquema -que la administración mileista mantiene latente al no haberlo suprimido ni con el mega DNU 70/23, ni con la ley Bases- deja a cargo del Estado las inversiones más costosas destinadas a la renovación y el mantenimiento de las vías.
Además, las autoridades ferroviarias también tendrían que desembolsar los recursos iniciales para las reparaciones integrales y puesta a punto de todo el parque de locomotoras y vagones que saldrían en alquiler.
Pese a que en la contienda electoral Milei defendió la implementación del sistema "Open Access", hasta ahora el Gobierno no ha dado señales claras de lo quiere hacer con las concesionarias privadas, ni con los trenes de las tres líneas de cargas (Belgrano, Urquiza y San Martín) que opera la empresa estatal Belgrano Cargas y Logística, la cual ha quedado en la lista de las "privatizables" que figuran en la ley Bases.
A la incertidumbre en envuelve al sector, se agrega otro dato negativo generado por la aplicación del "motosierra" libertaria que ha dejado paralizadas casi todas las obras de modernización de vías y de infraestructura ferroviaria que estaban curso con fondos presupuestarios y con financiación de organismos internacionales.
Fuente: BAE Negocios