Por Antonio Rossi
Con una polémica movida que suma más incertidumbre a la crítica situación económica del sector, el Gobierno de Javier Milei decidió salir en auxilio de las transportistas eléctricas para que puedan pagar los sueldos y afrontar los gastos operativos más urgentes que les permitan mantener en servicio las redes de electricidad de media y alta tensión que están funcionando cada vez más al límite de sus capacidades técnicas.
Tras confirmar de manera indirecta que seguirá vigente la motosierra y la poda de fondos, la Secretaría de Energía comandada por Eduardo Rodríguez Chirillo resolvió modificar las prioridades de pago del mercado eléctrico para que las transportistas sean las primeras en poder cobrar sus facturas atrasadas con los limitados recursos que administra la Cammesa.
Si bien no resuelve el problema de fondo que es el fuerte rojo económico que arrastra la administradora eléctrica, la medida en juego aleja -transitoriamente- el riesgo de default operativo que sobrevuela en torno a Transener, la principal operadora de las redes y líneas nacionales de transmisión eléctrica.
A principios de marzo, las autoridades de Transener -cuya sociedad controlante está integrado en partes iguales por Pampa Energía y la estatal Enarsa- salieron a alertar que no iban a poder abonar los sueldos por la falta de ingresos que enfrenta debido a los atrasos en los pagos que acumula la Cammesa.
Casi al mismo tiempo, la Asociación de Transportistas de Energía Eléctrica (ATEERA) y su colega AGEERA (la asociación de generadores) también expresaron en una inédita nota conjunta al ministro de Economía, Luis Caputo, su "extrema preocupación" por los cortes que podrían surgir en el suministro eléctrico debido a los desequilibrios económicos que enfrentan las empresas por los crecientes atrasos en los pagos que se vienen registrando tras el fuerte recorte de gastos implementado por la administración libertaria.
Ante riesgos por cortes de luz, el Gobierno hará transferencia de fondos
Tras tomar nota de la situación límite del sistema de transporte y ante la perspectiva de que Economía siga pisando las transferencias de fondos, la secretaría de Energía decidió darle preponderancia al pago de las facturas de las transportistas y relegar a las empresas generadoras que ahora serán las últimas en cobrar, siempre y cuando la Cammesa cuente con recursos suficientes.
Por medio de la resolución 34/24, el área de Rodríguez Chirillo reconoció que "de acuerdo con lo informado por Cammesa, el Fondo de Estabilización se ha encontrado en déficit permanente, razón por la cual no es posible cubrir en tiempo y forma la totalidad de las diferencias entre lo recaudado por los precios y cargos facturados a los agentes demandantes y los montos que efectivamente habrá que abonar a los agentes acreedores del mercado eléctrico mayorista (MEM)".
Seguidamente, la resolución destacó que "el sector de transporte de energía eléctrica ha sido calificado como servicio público por la ley 24.065 y su correcto desempeño resulta imprescindible para un normal funcionamiento operativo del MEM, en tanto posibilita la vinculación entre la oferta y la demanda". Remarcó, además, que "por otra parte, la totalidad de las acreencias del transporte de energía eléctrica representa una porción significativamente menor en función de la magnitud de las transacciones mensuales del MEM".
Frente a esa "situación de emergencia", las autoridades de Energía precisaron que "resulta conveniente establecer un mecanismo para la asignación de los recursos -escasos e insuficientes- para priorizar a los agentes transportistas del MEM, buscando privilegiar el pago de sus acreencias, con el objeto de preservar la continuidad en la prestación del servicio público de transporte".
Cammesa, con moras en los pagos a agentes generadores y transportistas
Tras desembarcar en el Palacio de Hacienda, el ministro Luis Caputo decidió cerrar la caja del Estado y cortar las asistencias de fondos que había solicitado Cammesa para los meses de enero y febrero.
En el primer mes del año, Cammesa solo le pudo abonar a las generadoras y transportistas el equivalente al 50% del total que debían cobrar por las transacciones de noviembre.
Los números de enero mostraron que el superávit financiero de casi $500.000 millones que Caputo exhibió como un hecho "histórico", coincidió prácticamente con el monto en juego que debía haberle girado a la administradora del mercado eléctrico.
La situación empeoró en febrero, cuando no pudo transferir ni un solo peso por las facturas correspondientes del mes de diciembre. Para marzo, el panorama promete agravarse porque Economía solo ha prometido girar apenas un 20% de la asistencia requerida por Cammesa.
Hasta ahora, la deuda acumulada alcanza el equivalente de casi u$s1.000 millones que va generando intereses punitorios que no hacen más que elevar los compromisos de pagos que la administradora del mercado eléctrico tendrá que afrontar en los próximos meses.
En la nota remitida a Caputo, los titulares de ATEERA, Pablo Tarca y de AGEERA, Gabriel Baldessarre habían puesto sobre el tapete dos hechos negativos salientes.
En primer lugar, apuntaron que observan "con extrema preocupación que el Tesoro no transfiere, en tiempo y forma, las sumas que periódicamente informa y solicita Cammesa para el cumplimiento de sus obligaciones mensuales, lo que genera moras en los pagos a los agentes generadores y transportistas y pone en serio riesgo el normal abastecimiento de electricidad".
En segundo lugar, destacaron que "ese contexto no solo produce un perjuicio económico a nuestros asociados, sino que también afecta la cancelación de los costos operativos corrientes (sueldos, impuestos, proveedores, costos variables, etc.), al tiempo que genera incertidumbre para la planificación de las inversiones en mantenimiento y el desarrollo normal de las tareas, poniendo en riesgo la continuidad operativa del Sistema Argentino de Interconexión (SADI)".
Fuente: iProfesional