Por Antonio Rossi
Con sus márgenes de acción recortados desde principios de año y jaqueado por la presión del ministro de Economía, Toto Caputo y el asesor presidencial Santiago Caputo; Eduardo Rodríguez Chirillo renunció a la Secretaría de Energía tras diez meses de una gestión tambaleante que acumuló disputas y complicaciones operativas.
La salida de Chirillo, uno de los primeros especialistas que se sumó a la campaña electoral de Javier Milei con la propuesta de un plan energético que le permitió acceder a los empresarios del sector, implica puertas adentro del Gobierno tres cambios clave:
- Una mayor cuota de poder para Toto Caputo, que pasará a controlar por completo un área sensible en materia de inversiones.
- La incorporación de una profesional recomendada desde las filas del macrismo.
- La implementación de una nueva política energética y tarifaria más ordenada y supeditada al objetivo central de seguir apuntalando la desaceleración inflacionaria.
La nueva encargada de la Secretaría de Energía será María Tettamanti, una ejecutiva empresaria con una trayectoria en empresas petroleras y gasíferas. Inició su carrera profesional en 1995 como responsable del sector comercial de Cammuzzi Gas Pampeana.
Entre 2004 y 2013 estuvo a cargo de las áreas de ventas de Total Austral, Albanesi y Gas Meridional SA. Durante cuatro años (2013 a 2017) fue directora comercial de Metrogas y luego retornó a Camuzzi, donde se desempeñó hasta el año pasado. Actualmente estaba al frente de la gerencia general de la empresa de servicios a empresas petroleras NRG Energía.
Integrante del equipo de Energía que había armado el año pasado Patricia Bullrich, ahora Tettamenti logró desembarcar en la administración mileísta apoyada por el principal accionista de Camuzzi, Alejando MacFarlane y ex secretario de Energía Emilio Apud.
La semana pasada, tras una orden de Mauricio Macri, Apud se reunió con el coordinador de Energía y Minería, Daniel González y le dejó el nombre de Tettamanti como posible sustituta de Chirillo.
Pese a haber integrado los equipos técnicos iniciales de Milei y ser el autor de buena parte de las reformas y desregulaciones incluidas en el DNU 70/23 y en la ley Bases; Milei terminó entregando a Chirillo luego de una disputa larga y desgastante que mantenía con el ministro de Economía.
Toto Caputo vs. Eduardo Rodríguez Chirillo
Exintegrante del equipo de Domingo Cavallo en los 90 y ex asesor del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Chirillo tuvo a su cargo el armado del plan energético para los sectores petrolero, eléctrico y gasífero que Milei se comprometió a llevar adelante durante la campaña.
Si bien los cambios normativos propuestos para el área de hidrocarburos quedaron plasmados en el texto de la ley Bases, Chirillo no pudo avanzar como pretendía con las reformas planteadas para los servicios eléctricos y gasíferos.
Los cortocircuitos con Caputo se dieron en torno a tres cuestiones: aumentos de tarifas, restructuración de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (Cammesa) y reducción de subsidios en los servicios de luz y gas.
El primer chispazo entre ambos se dio en febrero cuando Caputo le frenó el ajuste tarifario de hasta 700% que había aprobado para las distribuidoras y transportadoras de gas. Si bien ese aumento se terminó aplicando desde abril, la relación entre el ministro y el secretario quedó dañada y no dejó de agravarse.
El segundo encontronazo fue en mayo cuando Caputo volvió a frenarle por dos meses a Chirillo la implementación de las actualizaciones tarifarias mensuales que les había concedido a las empresas eléctricas y gasíferas.
A esto se sumaron el desplazamiento de los hombres de confianza que Chirillo había puesto en Cammesa y en la conducción de la empresa estatal Enarsa.
Otro motivo de conflicto se planteó alrededor de los plazos para concretar el reordenamiento de Cammesa y el traspaso de los contratos de compra de energía a las empresas distribuidoras.
Chirillo intentó avanzar a fondo con ese cambio con una movida que incluyó la eliminación de la gerencia de contratos de Cammesa, con el argumento de que sólo se iba a ocupar de sus tareas originarias de “administración y monitoreo” del mercado eléctrico mayorista.
Al evaluar que esa reforma iba a acelerar los aumentos de tarifas, Caputo decidió correr al titular de Cammesa que respondía al secretario y colocar en ese puesto al exmacrista Mario Cairella y frenar la iniciativa hasta nuevo aviso.
Encontronazo por la reducción de subsidios
También colisionaron por la aplicación de la Canasta Básica Energética (CBE), el nuevo esquema de reducción de subsidios que impulsaba Chirillo para limitar las ayudas económicas solo a los hogares vulnerables.
Por las complicaciones técnicas y operativas, la aplicación de la CBE, que había sido anunciado para marzo, se fue postergando hasta que en junio Caputo decidió congelarla y establecer un “período de transición” hasta diciembre con el fin de “asegurar una reestructuración de los subsidios gradual, ordenada y previsible hacia un esquema que permita trasladar los costos reales de los servicios”.
A principios de julio, Caputo decidió intervenirle directamente el área a Chirillo con la designación del González, ex ceo de YPF, como nuevo coordinador de Energía y Minería.
Ahora, la nueva responsable de Energía tendrá que acoplarse a las directivas de González para afrontar los posibles cortes de luz en el verano, redefinir la política de subsidios y tarifas y promover las obras de infraestructura necesarias para la expansión productiva de Vaca Muerta.
Fuente: Nota Editada en LetraP