Las obras de la nueva circunvalación del Ferrocarril Belgrano a la ciudad de Santa Fe continúan ejecutándose a buen ritmo y ya presentan un 60% de avance, por lo que se estima que las pruebas en el nuevo enlace podrían comenzar en el segundo semestre de este año.
Tal como explicó enelSubte, la obra había sido licitada en 2019, pero fue adjudicada recién en julio de 2021 a tres consorcios, que se encargarán de diversos tramos del proyecto: Vial Agro, la UTE Pietroboni – Merco Vial – Sabavisa y la UTE Ferromel – Herso. El contrato con los adjudicatarios se firmó en septiembre de 2021, comenzando los trabajos en los últimos meses de ese mismo año. Durante 2022 los trabajos marcharon a buen ritmo, de acuerdo con los reportes periódicamente informados por el Ministerio de Transporte.
Las demoras entre la licitación y la adjudicación se debían a que la obra formaba parte de la “adenda 4” del contrato con China Machinery Engineering Corporation (CMEC), que financia el proyecto, y que fue ratificada recién en abril de 2021. Si bien existen negociaciones para la firma de una quinta adenda, que incluye la renovación de más de 900 km de vías e inversiones en material rodante, no hay novedades al respecto por el momento.
Cómo es el proyecto
El proyecto de la circunvalación de Santa Fe contempla la renovación de unos 45 kilómetros de vías existentes separados en dos tramos: de Laguna Paiva a Gobernador Candioti (ramales A y F del Belgrano), y de Empalme San Carlos a Santo Tomé (ramales F2 y F4), más la construcción de un nuevo enlace entre los ramales F y F2 de unos 15 kilómetros de extensión entre Gobernador Candioti y Empalme San Carlos (ver detalle en el mapa). La obra también incluye la construcción del citado nuevo puente ferroviario sobre el río Salado y tres puentes vehiculares para cruces a distinto nivel en las rutas provinciales 70, 11 y 4.
Los trabajos también incluyen obras complementarias como intervenciones sobre obras de arte (puentes, alcantarillas y desagües), señalamiento, pasos a nivel, instalación de barreras automáticas -sólo en algunos cruces- y cerramientos perimetrales, entre otras.
Con este nuevo desvío, los trenes cargueros del Belgrano realizarían un “by-pass” a la ciudad de Santa Fe y dejarían de transitar por su ejido urbano, una zona altamente poblada.
Esto, además de permitir una disminución de la congestión vial en los más de 60 pasos a nivel existentes, impactará positivamente en la operación ferroviaria: se calcula una disminución del 30% en los costos logísticos y una notoria reducción en los tiempos de viaje en los trenes con destino al puerto de Timbúes (de 10 horas a 2:30 horas entre Laguna Paiva y Timbúes), que sumó nuevos desvíos ferroviarios en el último tiempo. A su vez, permitirá un aumento de la frecuencia, pasándose de dos trenes diarios con 45 vagones a seis trenes diarios con hasta 100 vagones.
En tanto, se prevé que la vía que dejarán de utilizar los trenes cargueros entre Santa Fe y Laguna Paiva no quedaría inactiva, ya que se proyecta utilizarla para el servicio regional de pasajeros entre ambas ciudades. Si bien este tren fue anunciado hace casi ya dos años y tiene hasta material rodante asignado, no ha sido implementado a la fecha.
Fuente: enelSubte